Historia del vino: La Edad Media

Se dice que la Edad Media fue una época oscura y poco prolífica, ¡pero nada más lejos de la realidad! Aquí nos encontramos a grandes artistas y también a grandes vinicultores que forman parte de la historia del vino. El vino en el medievo estaba considerado como una bebida saludable y con un gran prestigio social. Es en esta época cuando se introducen mejoras en la vinificación y se forjan muchos de los procesos que dieron origen a la gran variedad de vinos actuales. Si en época romana el vino blanco representaba riqueza y poder, el tinto estaba destinado al populacho… pero ahora las cosas cambian. Sin duda, ¡la historia del vino es una de las más apasionantes del mundo! En la Edad Media la elaboración del vino estuvo muy ligado a los monasterios y conventos, ya que gran parte de las tierras pertenecía a la iglesia, además de a los señores feudales. Se empezó a almacenar el vino en barricas, las cuales se situaban en los sótanos, y serán el origen de las bodegas. El uso de la vid y su plantación se extendió por toda la península, sobre todo después de la Reconquista, uno de los vinos más representativos de esta época es el de la Rioja. Sin embargo, la historia del vino viene de muy atrás, y en Galicia ya hay referencias de producción vinícola desde el siglo IX.

ELABORACIÓN DEL VINO EN ÉPOCA MEDIEVAL
La historia del vino ha sufrido numerosas transformaciones. Muchas veces disfrutamos de una copa de vino sin ser conscientes de lo que tenemos entre nuestras manos, así como en su delicada y laboriosa elaboración, un proceso que ha mejorado siglo tras siglo hasta alcanzar el estatus actual. En la Edad Media es donde se comenzó a diferenciar los diferentes tipos de vino en función del tipo de uva, el prensado y el tiempo de fermentación. Una cosa un tanto curiosa que se hacía en esta época era añadirle especias, la finalidad era suavizar su fuerte sabor y hacerlo más saludable. Se comienza a utilizar el vino en las comidas. Se le considerada la bebida más importante y prestigiosa de todas, ¡incluso más que la cerveza! Los vinos más prensados eran para las gentes más pobres por su baja calidad, mientras que los de un solo prensado eran exclusivos para la alta sociedad, según nos cuentan las fuentes de la historia del vino. La elaboración de vinos rojos supuso una alta especialización y conocimiento de elaboración importante. Esto supuso un claro aumento en el precio, ya que el producto final era mucho más elaborado y necesitaba de un mayor tiempo de fermentación.

FUENTE: WWW.dicoval.com