Bodega Soledad

El Blog de Bodega Soledad

Fecha de publicación:
13 de enero de 2022
Categorías:
ActualidadCalidadEl vino

La Calidad del Vino Sí depende de la Geografía.

La geografía también marca el sabor del vino.

Lo que más define a un buen vino es su calidad. La calidad de su sabor, de su textura, de su grado justo de alcohol. La calidad de la uva que lo ha creado, y es que para que la uva sea de buena calidad, la geografía juega un papel esencial en el proceso. Cuando hablamos de geografía, hablamos de altitud.

La altitud es uno de los factores más importantes en el desarrollo de la vid, pues a mayor altitud, menor temperatura, y es que cada 100 metros de altura, la temperatura desciende 1 ºC, lo que hace que el clima sea más fresco y, en consecuencia, los vinos sean más frescos y fluidos, además de más ácidos y longevos. Las temperaturas cuanto más bajas, más lenta hace que sea la maduración de las uvas, mientras que las cálidas noches estivales permiten un mejor equilibrio entre el azúcar y la acidez de la uva.

La altura conlleva, por tanto, las variaciones de temperatura correspondientes para asegurar una maduración correcta -pero constante- de la vid, la cual necesita todo vino de calidad. Además de que, a mayor altitud, mayor incidencia del viento, lo que mejora el estado de salud de la viña, dificultando el desarrollo de hongos y bacterias que provoquen enfermedades a la cosecha.

Por otra parte, otro factor que permite que la uva conserve una correcta acidez hasta su entrada en bodega es la amplitud térmica, es decir, la diferencia de temperatura entre el día y la noche. Donde a mayor amplitud térmica, las uvas obtienen una mayor calidad, ya que la uva madura más lentamente sin degradar su grado de acidez. La luz solar es otro factor de notable importancia, ya que condiciona el grosor del hollejo -la delgada piel que recubre la pulpa y el pepita-, donde se concentran los aromas y el color de las uvas.

Fuente: El Diario.